No todas las lanzaderas son espaciales

Me defino en muchas ocasiones como cateto de ciudad. Jamás he ordeñado una vaca, pero es que ni tan solo la he tocado, y prometo que me encantaría hacerlo. No sé cómo es una oveja al tacto ni cómo huelen las pocilgas. Por eso me encanta salir de la ciudad a aprender todo aquello que no sé, es la úncia forma que tengo de paliar esta ignorancia galopante.
En este puente he visto, por primera vez, un telar hecho y derecho (y no una minitejedora de juguete). Verdaderamente aluciné al comprobar la confección de telas a mano, con máquinas puramente mecánicas, sin ningún elemento electrónico. Fue en un comercio de Bubión (Granada). Allí aprendí que una de las piezas del telar es la «lanzadera» (en los denominados «telares de lanzadera»). Se trata de un trozo de madera que lanza (literalmente) la canilla con el hilo realizando una pasada.

Lo mejor es ver el vídeo de abajo (no lo grabé yo, lo encontré en Youtube), se observa que tira de un mango hacia abajo para hacer funcionar la lanzadera.

3 pensamientos en “No todas las lanzaderas son espaciales

  1. La gente que vive en el campo saben hacer muchas cosas, construyen sus casas, saben de electricidad, de fontanería, conocen los animales, los árboles; son más autosuficientes que los que vivimos en la ciudad y estamos «especializados».Saludos.

  2. Alejandro:Más o menos eso es lo que pretendía mostrar, lo que ocurre que tú lo has explicado muuuuuuuuuucho mejor que yo.Un saludo.

  3. yo he visto pescadores haciendo redes enormemente enormes con tan sólo una lanzadera y mucha paciencia. aún debo de tener una lanzadera por casa….

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