Los héroes de la ciencia

Los que somos profesores de ciencias en secundaria vemos en nuestros alumnos un reflejo impecable de algunos adultos. Con echar un ojo por un par de libros de Kuhn, por ejemplo, uno se da cuenta de que un adolescente de 15 años está al mismo nivel intelectual que los científicos adultos de hace dos mil años. Y no es malo, es evolución. Evoluciona el pensamiento, el conocimiento, la calidad del conocimiento. Pero no nacemos sabiendo. Por suerte o por desgracia, es así. La educación y el estudio nos hace pasar por las mismas etapas que ha pasado el ser humano a lo largo de la historia de la ciecia. Un adulto que no ha pasado todas las etapas puede llegar a convertirse en un caballero del medievo. Y de hecho ocurre más de lo debido.

La necesidad del fomentar el pensamiento crítico a estas edades es fundamental. Si el alumno no se encuentra en este momento ante conflictos cognitivos y procura resolverlos, será portador de una mente obtusa durante el resto de su vida. Y puedo decir que hay mucho adulto que no se enfrentó de joven a estos conflictos y, ya de mayor, no es capaz de resolverlos, creyéndose por tanto cualquier superchería que entre por sus ojos.

Es por esto que la divulgación científica juega un papel esencial como alternativa y complemento a la educación, durante toda la vida de la persona. Y, dentro de la oferta divulgativa, deben estar incluidos los mecanismos de lucha contra la pseucociencia. Y aquí nos encontramos tristes divergencias en la comunidad científica.

Por feo que parezca, no son pocos los compañeros científicos que no ven necesario dedicar tiempo a desmontar leyendas, bulos o supercherías. Y me pongo en su papel: están tan rodeados de otros científicos que piensan que es una minoría residual la que cree en adivinaciones y el Tarot, por poner sólo un par de ejemplos. Y es que, en estos días, con el asunto de la conspiración lunar, muchos colegas me han mirado raro diciendome que cómo va a ser que haya gente que crea que los viajes a la Luna fueron un montaje. A ellos, con todo mi cariño, con todo mi respeto porque han tenido la valentía de dedicar su vida la investigación, les digo que no tienen los pies en la tierra. Los que luchamos cada día con adolescente y, todavía peor, con padres, sabemos que las supercherías están más extendidas de lo que parece. Si no es así, ¿por qué crees que se venden tantos misterios en la televisión? Por que hay demanda. Y donde hay demanda, hay mercado.

Pero hay otros científicos que dedican parte de su tiempo a la divulgación. Para mí estos son los héroes de la ciencia, los que no cierran los ojos, los que se arrancan los párpados para ver la triste realidad: 5000 años de evolución cultural pero en un cerebro que permanece inalterado. Un cerebro que debe aprender en vida los mecanismos científicos que el ser humano ha aprendido en toda su historia. Algo difícil, arduo. Por eso creemos en rarezas, por simplicidad, es más cómodo tragar mentiras y no llenar nuestro cerebro de razonamientos.

Y todo esto es una perorata por culpa de Michael Shermer y su magnífico Por qué creemos en cosas raras. Shermer cuenta una anécodata de la historiadora Mary Lefkowitz. La investigadora acudió a una charla de afrocentristas y allí escuchó que Aristóteles habría robado escritos filosócos procedentes de África en la Biblioteca de Alejandría. Pero Lefkowitz apuntó en voz alta que eso era imposible porque, en efecto, la fundación de la biblioteca era posterior a la muerte de Aristóteles. Una vez finalizada la charla, Lefkowitz se acercó a uno de sus compañeros a explicarle con espanto lo que acababa de oir y éste soltó: «Me da igual quién robó qué de dónde». Un triste caso de pseudohistoria y de investigador que cierra sus ojos.

Si eres científico, o conoces a alguno, lucha contra la sandez. Porque si no lo haces, el necio eres tú.

— *** —

La Asociación para el Avance del Pensamiento Crítico fomenta eso mismo, el pensamiento crítico. El escepticismo es su bandera. Por desgracia, el término escepticismo tiene -a veces- connotaciones negativas. Entiéndase aquí escepticismo científico, en el sentido de dudar para avanzar en el pensamiento. El escéptico no niega posibilidades, pone a prueba estas posibilidades. Esta asociación no es una secta ni nada que se le parezca. Se trata de un grupo de personas que piensan que el ser humano es capaz de hacer algo más que vegetar delante de la televisión como una maroma de carne. Infórmate.

23 pensamientos en “Los héroes de la ciencia

  1. Me parece muy interesante esta entrada como una llamada a la mente de la gente para que despierte. Pienso que los profesores en este sentido tienen un papel muy importante, y me gustaría saber si en el profesorado hay una sensación de dejadez por parte de las familias en inculcar este pensamiento crítico.Un saludo

  2. "…que piensan que el ser humano es capaz de hacer algo más que vegetar delante de la televisión…"Yo cada día soy más escéptico respecto a esto. A veces a uno se le acaban las fuerzas y se siente como el Quijote luchando contra molinos de viento. Pero bueno, luego uno lee post como éste y decide volver a levantarse y seguir cabalgando.

  3. Creo que la anécdota de Lefkowitz no está bien contada, o bien redactada. ¿Quién se acercó a quién para "explicarle el asunto"? ¿Un compañero a Lefkowitz o Lefkowitz a un compañero? ¿Se acercó a un compañero para soltarle «Me da igual quién robó qué de dónde» sin mediar palabra? ¿O quien fue quien lo dijo? ¿Y qué tiene que ver esa segunda respuesta con la primera, atendiendo a preguntas de los "filosócos"?A mí por lo menos no me queda claro, y saber explicar las cosas también ayuda a entenderlas bien.Saludos.

  4. Es un poco lo que venimos reclamando desde los distintos medios de divulgación científica, que los propios profesionales se impliquen más en transmitir sus conocimientos. Encerrarse en la torre de marfil y pretender que la sociedad avanza hacia un mundo de pensamiento racional no es más que ponerse una venda y no querer ver la realidad. El fomento de un pensamiento crítico y racional no es sólo una actitud positiva, sino extremadamente necesaria en un mundo donde magia y ciencia cada vez son más parecidas para un amplio sector del público.

  5. Eugenio, lo que cuentas no solamente ocurre en Secundaria. En la universidad también hay gente que cree todavía en bulos, supercherías, engaños y pseudociencia barata. Y no te estoy hablando únicamente de los estudiantes (tú ya lo sabes también desgraciadamente que algunos profesores creen en pamplinas). Tendrías que haber visto y escuchado a más de uno de mis "compañeros" de profesión cómo me miran y lo que dicen de mi asignatura "Física en la Ciencia Ficción". Muchas veces creen que es una asignatura para enseñar física sin esfuerzo y lo ven como algo desprestigiador, no les gusta quitarle la dificultad y el esfuerzo a una ciencia como la física. Me han llegado a decir que lo que hago es "endulzar" la ciencia y quitarle rigor (¿se habrán leído alguno de mis post en el blog?). Y, sin embargo, no han caído en la cuenta de que (y lo digo siempre en clase y en la guía docente de la asignatura) el principal objetivo de la asignatura es divulgar y, sobre todo, fomentar el espíritu crítico y escéptico, tan propio del trabajo científico.Triste mundo éste, … aún.

  6. Hablando de enseñanza y divulgación. Hace algún tiempo que me hago la siguiente reflexión: recuerdo la enseñanza que me tocó vivir de ciencias en general y de la física en particular, como algo desmotivador, ajeno al alumno y repleto de formulaciones.fué una enseñanza que no consiguió llamar mi atención. Años más tarde, bastantes años más tarde, he sentido una creciente curiosidad por temas científicos y por la comprensión del Universo y lo que más me ha llamado la atención es lo poco que se sabe de casi todo. Y es que uno salía de la enseñanza, al menos en mis tiempos, con la noción de que todo se conoce, como es el universo, desde la escala más grande a la estructura del átomo. Y se explica todo casi como un dogma, las cosas son así, cuando creo más fascinante incluso lo que no sabemos. Incluso desde un marco histórico, como ha ido cambiando el pensamiento científico con el paso de los siglos y el papel del hombre en él resulta esclarecedor para entender la posición de magias diversas.Mi comentario no tiene que ver estrictamente con el tema de la entrada, pero tratandose de personas dedicadas a la divulgación y enseñanza quizás se comprenda mejor.

  7. Joan:Por supuesto que tiene que ver tu comentario con la entrada. Fíjate en lo que dices, el presentar la ciencia como un órgano cerrado, que no crece, que lo sabe todo es lo que le hace más daño. Eso es la pseudociencia. La ciencia busca continuamente sus errores para mejorar y crecer, la ciencia tiene vías de investigación para seguir creciendo. Los que conocen el vocabulario psicopedagógico saben lo que es la zona de desarrollo potencial del niño: una parte de, digámoslo así, su inteligencia donde puede seguir aprendiendo. La ciencia, afortunadamente, está rodeada de esta zona de desarrollo potencial. Y será ciencia mientras exista esta frontera. El día que no exista será fe.

  8. Te pido disculpas por adelantado aunque esto mismo (ya lo verás) es a mi juicio el peor síntoma de exactamente lo que dices. Mi punto es que la política abona ese campo y, algo lamentable, por política he visto a muchos escépticos con, digamos la astrología, ser magufos acabados cuando les tocas "lo suyo". Ya te comenté hace unas semanas el tema de del calentamiento climático y el escepticismo a plazos, pero hay más que luego apunto.Esto que te comento se me presenta desde que era adolescente, el oír a un político soltar las paridas de crédulo o la falacia más grosera para defenderse. Y el tío, es evidente para todo el mundo, maneja poder, mucho poder a veces. Pero eso no sería otra cosa que mala propaganda para el sentido común si no se combinara con las ganas de instrumentalizarlo todo, incluida la ciencia Y TEMAS MÁS IMPORTANTES. Es terrorífico contemplar la corrupción de la academia (el ejemplo de la historiadora es perfecto en este sentido), donde hasta premios Nobel no pasan de magufos de segunda y revistas peer review no dudan en pagarles su precio.Para acabar con un ejemplo, de hecho es por esto que te pedía disculpas al principio, es alucinante la trola colosal de que la culpa de la quiebra del sistema financiero ha sido la poca intervención cuando es el sector que más intervención ha tenido por parte de las autoridades a todos los niveles, desde la emisión de moneda hasta la presencia en consejos de administración de entidades colosalmente importantes pasando por el control por ley de los cobros por préstamos. Cuando la gente se traga esto, que es puro "mirar alrededor", la batalla contra cualquier pseudociencia me parece como de risa y, sobre todo, perdida de antemano: es como prepararse para la marejadilla cuando hay un tsunami.El problema de la pseudiciencia es de más alcance.

  9. Querido Eugenio: excelente. No puedo estar más de acuerdo contigo. Hay un compromiso ético que no debe eludirse jamás en ninguna profesión. Abrazos,Diego

  10. Por cierto: eso mismo que apuntas, le sucedía a Alberto Reig Tapia, que ha dedicado dos libros a desmontar las excéntricas teorías de un antiguo miembro del GRAPO. Un revisionista para quien Franco era una hermanita de la caridad. A él, sus compañeros historiadores también le decían, más o menos, que perdía el tiempo con todo ello.Abrazos,Diego

  11. Escepticón:No tienes que pedir disculpas por expresar tu opinión educadamente, como haces. Sí te diré algo, porque es posible que no lo haya dicho en el texto. Una mala educación científica se traduce en se un crédulo en todos los ámbitos de la vida, en ser un engañado, un bobo. Lo importante, para mí, en la educación científica no son tanto los contenidos. La clave está en la metodología. Una metodología científica basada en la duda, no en la negación, te proporciona herramientas ante un gran abanico de tempestades. O, como dices, ante un tsunami.

  12. – ¿Por qué los planetas son como esferas?- Pues supongo que es porque es la forma más perfecta…Esa es la respuesta que me dió una profesora de (creo recordar) 1º del antiguo BUP en clase de ciencias naturales. Menos mal que no me convenció mucho, pero tardé un par de años en encontrar la respuesta por mi cuenta tras estudiar algo de mecánica clásica. Ese tipo de respuestas son en mi opinión algo inadmisible para alguien que está dando una clase de ciencias. Por suerte yo encontré la solución por mi parte, pero en esa clase habría otras 20 personas que se quedaron con esa idea en la cabeza quién sabe por cuánto tiempo…

  13. Alejandro:Un espanto, un verdadero espanto. En más de una ocasión los alumnos me han preguntado algo que no sé bien. ¿Qué les digo? En una semana como mucho quiero la respuesta. Y todos a buscar (yo en el cambio de clase me voy a buscarla como un loco y me preparo, jejeje). No pasa nada por decir "esto no lo sé con precisión, aprendamos juntos"

  14. Alejando, si lo piensas, tiene razón. ¿Por qué la esfera es la forma más perfecta? Porque todos los puntos de la superficie están a la misma distancia del centro. Es, desde el punto de vista gravitatorio, equipotencial.El único matiz reprochable a tu profesor es que la esfera es perfecta debido a sus propiedades, no recibe sus propiedades de su perfección 😉

  15. Peká:Pero la esfera, que por otra parte los planetas no son esferas, es una consecuencia, es el efecto, no la causa. Quiero decir que la esfera es la causa del momvimiento de rotación de una masa que primigeneamente está disociada y que se va apelmazando para formar un planeta.Decirle a unos chiquillos que la esfera es lo más perfecto (geométricamente perfecto con respecto a qué, porque lugares geométricos hay infinitos) es fundar en ellos un pensamiento místico, platónico y pitagórico. Un pensamiento que ha hecho mucho bien en las etapas tempranas de la ciencia pero que debe tomarse hoy con prudencia y como herramienta de inicio. Sólo eso.

  16. Te decía que la política hace magufos y aparece un buen ejemplo (para provocar, que a algunos les va más que pensar)."Por cierto: eso mismo que apuntas, le sucedía a Alberto Reig Tapia, que ha dedicado dos libros a desmontar las excéntricas teorías de un antiguo miembro del GRAPO. Un revisionista para quien Franco era una hermanita de la caridad."Que es invocar a un magufo de la historiografía ¡para denunciar eso que se es!. Ya lo delata el lenguaje, eso de "revisionista", que se usa para los nazis que cuestionan el holocausto, dando fundamento a un diseño retórico de la propaganda de una ideología perfectamente reconocible. El nivel intelectual del debate baja muchos enteros para algunos cuando les tocas la consigna de debido cumplimiento (no he dicho que Pío Moa me parezca bien o mal, pero la ráplica será: "como te gusta eres franquista" o peor "si no dices lo que yo, facha", tan típico de la magufada pasada por la manaza de la política).Muchas gracias, Diego, por el ejemplo, ahora conviene que despliegues todo el repertorio habitual de falacias argumentales, a ver si nos lee algún astrólogo y aprende. Moa JAMÁS ha dicho "eso no me importa", pero sí lo ha hecho el magufo de la historiografía ¡que pones como ejemplo! Esa audacia en el embuste, caradura más bien, es algo que los homeópatas tienen que aprender de algunos de vosotros."Y no es que a nuestro buen catedrático le preocupen mucho mis tesis, pues aclara desde el principio que no merecen la pena,"¿Qué te parece lo que escribe el cátedro que pones como ejemplo? Qué cara más dura.http://blogs.libertaddigital.com/presente-y-pasado/de-las-indias-al-lago-espanol-5051/

  17. Me ha impresionado constatar que el conocimiento no hace evolucionar al cerebro. Es por eso que un niño nacido hoy, tiene la misma capacidad que otro nacido hace 2000 años. Es decir, que hijo recien nacido de un premio Nobel, es tan "ignorante" que el hijo de cualquier filósofo de la antigüedad. Por tanto, la ciencia y el conocimiento tienen que ser registrados y divulgados para transmitirlos a las generaciones venideras, y que el avance de una sociedad se realiza a la velocidad del más lento de dicha sociedad, no del más "informado".

  18. Hola! me parece muy interesante tu entrada de hoy pero creo que hay que hilar un poco más fino. A ver si consigo explicarme.1) Tienes toda la razón cuando dices que hay que fomentar el pensamiento crítico en los adolescentes. Desgraciadamente esta es una de las peores lacras de nuestra sociedad. Nadie intenta pensar por sí mismo. En este punto todos tenemos nuestra responsabilidad, los que nos dedicamos a la ciencia y los que se dedican a la educación.2) Con respecto a esta gente que cree en el tarot, en el creacionismo, y en chorradas similares, tras mucho tiempo pensando he llegado a la conclusión que lo mejor es no discutir con ellos. Cuando discutes, cuando estás en un debate con esta gente estás legitimando de forma implícita sus ideas. Y además merece la pena? Esta gente va a cambiar alguna vez de ideas? Son fanáticos, tienen fe, y contra la fe amigos míos no hay nada que se pueda hacer desde el punto de vista científico. Van a creer lo que les de la gana. 3) Tras estar un tiempo trabajando en ciencia, hay algo que me revienta de los científicos: si algo no entienden simplemente niegan sus existencia. Esto es tremendamente peligroso y supone una tara para el avance de la ciencia. Hay que tener los ojos abiertos y admitir que hay cosas que no conocemos.

  19. En mi opinión has usado un titulo ligeramente amarillista, además creo que cuando se habla de héroes de la ciencia, uno debería referirse a los grandes descubridores o a la gente que a dedicado su vida al mundo científico, los educadores son una parte importante y absolutamente necesaria pero de ahí a héroes hay un trecho, esta claro que es importante inculcar y capacitar a las personas para que el pensamiento critico y la lógica rijan sus vidas y en consecuencia el mundo , pero pensar que todo el mundo va a adoptar esa forma de pensamiento es poco menos que una utopía, ten en cuenta que la curiosidad, la indicativa y las ganas de aprender son cualidades “relativamente” innatas al ser humano, y digo relativamente , porque la gran mayoría de la gente no tiene ni el mas mínimo ápice de estas cualidades totalmente necesarias para desarrollar el pensamiento critico y la lógica, con lo cual no tiene sentido luchar contra fenómenos sociales tan extendidos como la fe o el pensamiento mágico, que ya están totalmente arraigados en la mente la mayoría de las personas , es curioso ver como le gusta la variedad a la evolución, nos a dotado de la herramienta mas maleable y plástica que existe, y en consecuencia tiene que “haber de todo “no tiene sentido luchar contra eso , porque esta claro que tanta variedad tiene alguna finalidad, que sentido tendría que todos fuéramos científicos? Quien trabajaría la tierra, o construiría el coche en el que viajas o el ordenador con el que has, quien te vendería la comida que llena tu nevera, o gestionaría tus vacaciones de este verano? No te martirices mas ,piensa las cosas son infinitamente mejor que hace un siglo(a nivel social), lo que pasa es que la capacidad social en general a llegado a su limite, solo pueden seguir desarrollándose lo que tienen capacidad para ello punto.

  20. @Anonimo. Está claro que tiene que haber y que habrá variedad de personas y, por tanto, de pensamientos; pero el que haya variedad no quiere decir que la gente se tenga que dejar manipular y engañar. Si desde pequeños nos enseñan a ser críticos con lo que observamos, viviremos la vida mucho mas libres de miedos y supersticiones y ahí es donde los profesores juegan un papel esencial.Eso no quiere decir que todos vayamos a salir "científicos" como dices…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*