¿Cómo están las aulas?

Este rap, El rap de violencia en las aulas, tiene su gracia. Es bestia, pero tiene su gracia. Ahora, ¿cuenta la verdad? ¿Es esto lo que está ocurriendo en nuestras aulas?

En mi contexto se entendería como una exageración, pues tengo la suerte de que en el centro donde imparto clases la disciplina es muy buena. Pero comparto con algunos compañeros algunas novedades del cambio social tan rápido que ha ocurrido en los últimos años:

– El alumno no suele ver al profesor como una completa autoridad

– El alumno quiere tener más derechos que obligaciones

– Muchos padres hoy dan pábulo a las historias que les cuentan sus hijos y, de entrada, el profesor siempre es el culpable.

– Si el alumno aprueba, el alumno ha estudiado. Si el alumno suspende, el profesor no ha sabido motivar

8 pensamientos en “¿Cómo están las aulas?

  1. La verdad es que este es un tema que me preocupa bastante.No tengo información de primera mano, y por ello me niego a crearme una opinión consistente, pero lo cierto es que se ha dado un cambio y ha sido a peor.Todo parece apuntar al poco tiempo que tiene, a día de hoy, una familia trabajadora para dedicar a sus hijos, de modo que toda la responsabilidad parece recaer sobre los centros docentes, los cuales, sin el apoyo de los padres, poco pueden hacer para que en los críos se asienten unos valores éticos y morales, que se pierden por completo cuando llegan a casa.Parece haber una tendencia a malcriar a los hijos como forma de compensación por el tiempo que no se les puede dedicar a lo largo de la semana.Lo que no le veo a la situación es una salida clara, ni me imagino hacia dónde apuntará la situación dentro de 7-8 años, cuando los alumnos sean los hijos de los que teneis ahora.Un saludo.

  2. Cuanta razón tienes Eugenio, comparto contigo todos los puntos que has enunciado, creo que definen muy bien la situación actual. A mi me pasa que también me encuentro en un centro bueno, con pocos alumnos conflictivos, pero donde se dan todas las circunstancias que citas. Un saludo! 😉

  3. El rap es divertido, pero no olvidemos que el humor siempre parte de la exageración. La violencia en las aulas es más un mito (¿o un deseo morboso?) de los medios de comunicación que una realidad. Hay algún caso aislado, pero son eso, casos aislados.Pero desde el otro lado del problema, del lado de los padres, yo creo que una situación como ésta es producto de errores de las dos partes, no sólo de los padres. Entonces para solucionarlo tienen que poner de su parte todos los implicados. Que los padres no somos los culpables de todo, ni la madre de Hitler tuvo la culpa de lo que le salió XD.El debate daría para días y meses, pero sí que os destacaré unos puntos de vista, por si os sirven para reflexionar.La forma de ganarse la autoridad de los jóvenes ha cambiado. Ese cambio no se ve reflejado en la actitud del 90% del profesorado, que sigue empleando las mismas técnicas que hace 40 años.Como madre, yo tengo unos valores a los que no pienso renunciar y la sumisión no se encuentra entre ellos. Entonces se van a producir conflictos, porque uno de los ejes fundamentales en los que se pretende basar la educación actual en el colegio es la sumisión. La crítica o la adopción de posturas propias desde el razonamiento están duramente castigadas.Yo veo que ante el aumento de la violencia (sobre todo la verbal que la otra tampoco ha crecido tanto), el profesorado reacciona con cobardía, lo que es percibido por el resto de alumnos. El chulito acaba hartando al profesor, lo da por "imposible". Cuando el resto de alumnos ven que ha conseguido que no se le aplique la disciplina, está claro que la autoridad se resiente.El profesor pretende que los padres colaboren adaptándose a sus horarios. A día de hoy, los permisos para hablar con el profe no están incluidos en ningún convenio colectivo, con lo cual es imposible la comunicación para los padres trabajadores si el profesor no pone nada de su parte. En 12 años escolares sólo he encontrado a una profesora dispuesta a ser un poco flexible. Una pena.Desde el lamento, no se consiguen soluciones, porque leer y oír constantemente a profesores quejosos nos acaba inmunizando. Lo siento, pero así es, y se agudiza porque laboralmente el profesorado es un colectivo privilegiado.Lo que peor veo de los padres es que quiten autoridad al profesor delante de los alumnos. Eso hace muchísimo daño y muchos padres no son conscientes y lo hacen a menudo. Tendemos a sobreproteger a los hijos.La escuela pública está en una situación lamentable. Somos (son) los ciudadanos con su voto los que han elegido quién gestiona la educación de sus hijos y han optado por los colegios concertados, que me parece una aberración peor que la de la enseñanza privada. La emigración es un problema exclusivo de la enseñanza pública, que carece de medios puesto que la mayor parte del presupuesto se lo llevan los concertados, que rinden muchas menos cuentas de las que serían deseables. La emigración requiere recursos, no por conflictividad sino por simple integración, porque lo de la conflictividad es falso, no está unido a la inmigración sino a la extracción social, como siempre lo ha estado.Ya digo que el debate daría para mucho, pero ya me he extendido de sobra.Un saludo, el blog es muy bueno. Felicidades y gracias.

  4. Anónimo, gracias por la intervención, muchas veces se echa por aquí de menos la opinión de los padres.Mi conclusión es que eres una madre comprometida, eso es lo que hace falta. Y hay muchas, por eso en mi entrada decía "muchos padres", porque me consta que no son todos.La verdad es que no puedo añadir mucho a lo que dices porque, como digo, mi centro es ejemplar en cuanto a disciplina. Y me topo con muchos padres comprometidos y dispuestos a colaborar mutuamente.

  5. El problema es amplio y abarca a todas las partes.Por una parte el profesorado no está actualizado, no digo en conocimientos, sino en las técnicas y recursos de ganarse al alumno, especialmente, el conflictivo por inadaptación o por falta de estructura familiar, que son los casos más frecuentes. Se necesita un profesorado que base su autoridad, primero, en el trabajo y el esfuerzo visibles;segundo en el trato afectivo y de personal ayuda y colaboración hacia el alumno y, claro está, con la exigencia al alumno de una correspondencia de actitud de esfuerzo y deseos de mejorar.Por parte del los padres que no basta con escolarizar al hijo/a. Comprarle los libros, el material y ¡hala! para clase.No, es necesario, en casa una labor de preparación elemental: que el colegio o el instituto es un lugar de convivencia, diferente del de la calle o de la pandilla, en donde se va a perfeccionarse como persona, comportamiento y actitudes y esfuerzo en el estudio en la medida de las cualidades del alumno. No se va a aparcar solo, al comedor, a las actividades extraescolares, etc. Se va a formarse y estudiar con esfuerzo y trabajo.Atención en el aula y estudio responsable en casa de las distintas áreas y curriculum.Al padre o madre colaboradores no solo formar parte de la AMPA para organizar eventos puntuales y sí seguimiento diario y continuo de sus hijos. En lo que hacen, en las compañías y todo ello con la información y contraste y en mutua colaboración e igual dirección que el tutor o tutora.Reconocer que los colegios, institutos, etc. son lugares de formación y educación. Ambiente distinto-gracias a d- al de la calle, modificador de pensamientos o hábitos facilones impuestos por la moda o la pandilla. El ambiente educativo sobre todo. Y ahí es donde se falla.Por parte de la administración: establecer criterios amplios de apoyo de refuerzo educativo para alumnos emigrantes o con dificultades y para ello no escatimar en las plantillas y a la vez realizar un seguimiento de los centros no desde los despachos y sí desde la realidad de los centros estimulando, controlando y sancionando cuando fuera necesario y a quien correspondiese: fuese profesor, alumno o familia.Y los políticos legislar no cara a las elecciones y sí cara a resolver de verdad el problema. Pero esto que es fácil de decir, supongo que no será tanto de hacer….Hasta la próxima.

  6. La canción de Eminem usada como base siempre me ha encantado, y la verdad es que la letra está graciosa (si es de ''El Hormiguero'', debe ser la primera cosa del programa que me hace gracia).Esta problemática es la madre del cordero. Yo diría que las dimensiones clave, en España, son las siguientes:-La escuela como agente de socialización secundaria: es decir, mandamos a la escuela a los niños no sólo para que aumenten su conocimiento teórico, sino también como una forma de entrenamiento de vida en sociedad. Es una responsabilidad compartida con los padres, pero por desgracia hay muchos que apenas se preocupan del comportamiento de sus hijos cuando no los tienen delante, esgrimiendo el respeto a su ''forma de ser'' como una excusa barata para la desidia o la falta de destreza.-La escuela como organización-institución: tiene sus normas, jerarquías, filosofía organizativa, relaciones con el entorno societal…Su definición es siempre conflictiva y sujeta a muchos condicionantes.-El ''medio ambiente'' cultural: sistema de valores y percepción de la educación. Es decir, hasta qué punto es la formación un valor central en una sociedad en la cual las mayores aspiraciones son el pelotazo, la corruptela, el golpe de suerte o el triunfo express. Hay muchos padres, y por supuesto muchos alumnos, que ven en la educación un modo de movilidad social ascendente y de autorrealización, pero ¿cómo extender esta imagen en entornos desestructurados o casos extremos de desmotivación?-La gestión del tiempo y las relaciones en relación a las exigencias laborales, las nuevas formas de familia y las expectativas sociales: es difícil conciliar la jornada laboral con el cuidado de los hijos, que a menudo se externaliza en la escuela. Esto puede favorecer una cierta distancia afectiva o incomprensión mutua por cierta ausencia emocional de convivencia cotidiana prolongada. El tiempo para uno mismo es menor, y el hijo se convierte en un ladrón de ese tiempo…un tiempo que pierde porque, piensa, ''en la escuela no le enseñan nada''. -La escuela como ''arena política'': inestabilidad legislativa, continua redefinición de formas, contenidos, sistemas de recompensa y castigo…a un ritmo inasumible que provoca desorientación. No hay un consenso sobre educación que haga viable un proyecto común sin renunciar al debate.-Los actores sociales en la actividad cotidiana de la educación: dinámicas relacionales, atribución de responsabilidades…Los alumnos se relacionan entre sí y con los profesores en formas que a menudo van cristalizando y pasando de promoción en promoción. Lo mismo sucede con los profesores. Es un juego cotidiano de definición de límites. A menudo fallan profesores pasotas o ineptos que no transmiten o se dedican a humillar al alumno, pero creo que es más común el caso de la imagen negativa del profesor como vividor que existe en muchos padres y se traspasa a los hijos. Es decir, se trata de un problema de raíces profundas y complejas. Pero al fin y al cabo, la falta de respeto al profesorado es, en última instancia, responsabilidad de quien la perpetra.

  7. Muy claro lo escrito por Anónimo. Yo agregaría que ahora se le ha dado mucha importancia a "los derechos del niño", pero nadie habla de las "obligaciones", entre las que están el respeto hacia sus profesores, porque hay que entender que de todo se puede discutir, pero debe ser con respeto.Además, agregaría que esto se viene gestando desde hace varios años ya, cuando se empezó con el "tuteo", porque acorta las distancias y hay un paso muy corto hacia la falta de respeto.

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